Hoy queremos hablarte de los EPI que conforman un sistema de protección contra caídas de altura, y te explicaremos cuáles son los componentes fundamentales de estos sistemas, para que tengas una visión general acerca de la complejidad que supone la selección y uso de este tipo de equipos.
Podemos decir que un sistema de protección anticaídas está integrado por tres elementos básicos de protección. Estos elementos, por sí solos, no pueden ofrecer la protección necesaria contra una caída de altura, pero bien seleccionados y ensamblados supondrán la diferencia entre un trabajo seguro y un accidente.
Para prevenir los riesgos derivados de una caída, hay que diseñar e instalar un sistema anticaídas que conste de estos tres elementos:
- Dispositivo de anclaje
- Elementos de conexión
- Elemento de prensión del cuerpo (arnés anticaídas)
Tipos de dispositivos de anclaje
El dispositivo de anclaje es el primer elemento de todo el sistema que hay que tener en cuenta. Deberá ser lo suficientemente seguro y estable como para soportar las fuerzas que se generen de una caída.
En el caso de que esté sujeto a su vez a un elemento estructural, tiene que ser lo suficientemente resistente como para soportar las tensiones que experimentará cuando le sean transmitidas las fuerzas derivadas de la caída de una persona.
Por ello, es fundamental que el diseño e instalación del punto de anclaje lo haga un profesional cualificado, que asegure que la estructura sobre la que se instala el punto de anclaje, y el propio punto de anclaje, sean capaces de soportar las fuerzas de las cargas máximas.
La norma europea que se aplica a los dispositivos de anclaje es la EN 795:2012 y describe cinco tipos de dispositivos de anclaje:
- Dispositivo de anclaje tipo A: Dispositivo de anclaje con la necesidad de anclaje estructural o elemento de fijación a la estructura.
- Dispositivo de anclaje tipo B: dispositivo de anclaje sin necesidad de un anclaje estructural o elemento de fijación a la estructura.
- Dispositivos de anclaje tipo C: Líneas de anclaje flexibles horizontales.
- Dispositivos de anclaje tipo D: dispositivo de anclaje que emplea una línea de anclaje rígida.
- Dispositivos de anclaje tipo E: Anclajes de peso muerto para uso en superficies horizontales.
Sólo los dispositivos tipo B y tipo E están cubiertos por el Reglamento (UE) 2016/425 y considerados EPI de categoría III.
Aspectos a tener en cuenta en el diseño de sistemas anticaídas
Reducción del factor de caída: que es la relación entre la altura de la caída y la longitud de la cuerda que hay entre el punto de anclaje y el usuario. Cuanto mayor sea, mayor será la fuerza que soportará el usuario cuando se detenga la caída, ya que habrá un tiempo mayor de caída libre. Por ello, hay que disminuir todo lo que sea posible la altura de caída libre, colocando el elemento de anclaje tan por encima del punto de anclaje del arnés del usuario como sea posible.
Evitar el efecto péndulo en la caída: a través de la limitación de la longitud del subsistema de conexión o la ubicación del punto de anclaje, con lo que evitaremos que el usuario se encuentre en una posición desde la que la distancia de caída hasta el suelo, u otro obstáculo, excede la longitud del elemento de amarre.
La distancia libre disponible: es la distancia de caída libre hasta el suelo, o el obstáculo más inmediato contra el que el usuario impacta en caso de caída. Deberá ser suficiente como para evitar el coche del usuario, teniendo en cuenta la elongación de los componentes del sistema tales como flecha de una posible línea de anclaje, elongación máxima de un absorbedor de energía, distancia de frenado de un dispositivo anticaídas, etc.
Sin duda, el diseño, instalación y uso de un sistema anticaídas no es nada sencillo y requiere la realización de una serie de cálculos y la toma en consideración de otros factores que, en caso de ser obviados, pueden desembocar en las más funestas consecuencias.
Por otro lado, es esencial realizar un correcto mantenimiento de los elementos del sistema (según instrucciones del fabricante) así como la debida formación que deben recibir todos los usuarios de estos sistemas.